Muchos sexólogos y especialistas como Raquel Graña afirman que el dolor en la penetración es uno de los problemas que se suele presentar en la vida sexual de muchas personas y que levanta grandes dudas. De hecho, hay estudios que confirman que alrededor de 1 cada 10 mujeres de entre 16 y 75 años sufre o ha sufrido en algún momento este problema. De hecho, se podría decir que es algo relativamente normal entre las mujeres el que se presente este tipo de problema a la hora de mantener relaciones sexuales. Más aún teniendo en cuenta la grandísima cantidad de razones por las que puede aparecer dolor en la zona vaginal antes, durante o justo después de la penetración.
Por ello, conocer los principales motivos por los que suele aparecer dolor vaginal durante la penetración puede ser fundamental a la hora de saber manejar la situación, por ejemplo, sabiendo cuando el dolor es meramente una cuestión psicológica o biológica, como la falta de lubricación, y cuando es necesaria la intervención de un ginecólogo o sexólogo para solucionar el problema. Algunas de las principales causas pueden ser:
1- Escasa o nula lubricación: En muchas ocasiones un bajo nivel de lubricación es uno de los problemas por los que la penetración se puede ver afectada. Si es tu caso, no te preocupes. El nivel de lubricación vaginal depende de factores como la edad o la propia genética de cada persona, además de verse condicionado por factores como el ambiente, el nivel de excitación e incluso tu alimentación.
Mientras la sequedad vaginal sea moderada y suponga más una molestia que un problema grave, la mejor solución suele consistir en contar con algún tipo de lubricante o aceite corporal para facilitar la penetración. En el mercado puedes encontrar diversidad de variedades, así como lubricantes que aporten diferentes sabores o sensaciones; o si, por otro lado, buscas una opción mucho más natural para que se ajuste a ti puedes optar por lubricantes cuya composición trata de asemejarse lo máximo posible a la composición natural del lubricante vaginal. Lo que sí has de tener en cuenta es de la existencia de dos bases diferentes en la composición de los lubricantes: los de base en silicona, los cuales no se secan y son la mejor opción para el sexo anal, a pesar de que hay que ser más precavidos con ellos ya que pueden causar alergias; los lubricantes en base agua, que, aunque se secan y absorben antes por nuestra piel, son mucho más naturales y alejan la posibilidad de producir cualquier tipo de reacción adversa. ¡Lánzate a probar!
2- Dispareunia: Es el nombre médico que se le da al dolor genital persistente que se presenta antes, durante o después de la penetración. Los principales síntomas de la dispareunia: dolor únicamente al introducir algo en la vagina o con el comienzo de la penetración; dolor en cada penetración, incluso con el uso de tampones; dolor intenso durante las relaciones sexuales; sensación de ardor, escozor o molestia persistentes; dolor punzante durante varias horas después de terminar con la penetración.
La dispareunia es un problema que, de no solucionarse, puede comenzar a suponer un problema grave en la vida sexual de una persona, por lo que si el dolor genital es fuerte y persistente se ha de recurrir a un especialista para que valore la posible existencia de una dispareunia y su causa, procediendo así al tratamiento que se requiera.
3- Vaginismo: Es la contracción completamente involuntaria de los músculos de la vagina o de la pared vaginal, los cuales provocan dolor o molestia ante cualquier tipo de penetración, sea del tamaño que sea. Son estas contracciones involuntarias las que hacen que la vagina sea demasiado estrecha, evitando así la actividad sexual y los exámenes médicos. El vaginismo es un problema sexual cada vez más común, pues según los especialistas, “de cada 100 mujeres que llegan a consulta, 15 padecen vaginismo y 30 dispareunia”.
Las causas por las que puede aparecer el vaginismo son muy diversas, pero entre las principales se encuentra la posible existencia de algún trauma psicológico o de algún abuso sexual en el pasado; factores individuales de la salud mental de cada paciente; las respuestas inconscientes de cada persona ante el dolor físico, como espasmos o reflejos y “el historial” de relaciones sexuales que pueda tener el paciente en cuestión, pues una acumulación de experiencias sexuales negativas también puede derivar en vaginiso.
Para encontrar el tratamiento necesario ante cada caso individual es de vital importancia acudir a un profesional, ya que éste deberá determinar si el origen del vaginismo se encuentra en una causa física como la existencia de un himen rígido o de endometriosis, o en una causa psicológica como ansiedad, una educación sexual escasa o restrictiva o el haber sido víctima de abusos, agresiones o violaciones. Lo que es importante tener en cuenta ante estos casos es que se ha de acudir a un especialista y que existen soluciones.
4- Falta de confianza: Puede darse el caso de que, aunque exista el deseo consciente de tener relaciones, de manera inconsciente se esté nervioso, en tensión o se tenga cualquier tipo de inseguridad al respecto que dificulte el relajamiento de los músculos vaginales. No es una causa nada extraña ante la aparición de dolor en la penetración en mujeres de cualquier edad. Una comunicación insuficiente en la pareja, una falta de seguridad en uno mismo o una escasa, o restrictiva, educación sexual pueden ser factores que produzcan este problema. En estos casos la comunicación de la pareja ha de ser el primer paso a llevar a cabo, sin descartar en ningún momento el uso de terapia o ayuda de especialistas para superar el problema.
¿Qué hacer ante cualquiera de estos problemas? Lo primero sería acudir al médico de cabecera o al ginecólogo para descartar cualquier problema de salud a nivel físico, como podría ser la endometriosis. Una vez se descarte, lo más adecuado es pedir cita con un profesional de la sexología que pueda evaluar la situación y ayudarte de la mejor manera posible, teniendo en cuenta que la mayoría de estos problemas son solucionados con terapia. La normalización de cualquiera de estos problemas para desprendernos de la vergüenza y los tabúes que el ámbito sexual provoca en nuestra sociedad es algo fundamental, pues una perspectiva errónea de la sexualidad puede causar o agravar este tipo de problemas.
Al final, lo importante, eres tú, tu disfrute y el de tu pareja.
¡Si quieres más información, esta ponencia con la ginecóloga y terapeuta sexual Nilke de la Rosa seguro que resuelve muchas de tus dudas!
Comments