En los últimos tiempos, las relaciones sentimentales han sufrido una transformación y remodelación completa, sobre todo entre las personas jóvenes: las relaciones abiertas son cada vez más comunes, la necesidad trabajar en la gestión emocional es algo conocido y palpable, la presencia de los factores de autoestima o traumas anteriores cobran mayor importancia en las relaciones, así como la influencia en estas de las redes sociales o el panorama sociocultural actual.
A través de una serie de entrevistas llevadas a cabo por SEXOLOG a estudiantes de la comunidad universitaria, los cuales mantienen diferentes tipos de relaciones, tratamos de acercarnos un poco más a la nueva realidad de las parejas sentimentales y sus nuevas problemáticas, donde la madurez e independencia parecen volverse la clave.
Como opina Eva García, quien, con tan solo 21 años ha mantuvo hasta hace unos meses una relación cerrada durante 8 años y medio, es precisamente la madurez de sus integrantes lo que puede condicionar en mayor medida una relación: “Creo que los problemas comunes están en la madurez de las personas, es decir, la forma de ser que tienen las personas y su comportamiento en la pareja no debe ser lo mismo cuando llevas poco tiempo con la pareja, eres más joven, con ideas más alocadas, que cuando llevas ya más años y quieres más estabilidad, más seriedad. Hay personas que pretenden mantener la misma forma de vida con la pareja cuando tienen 16 años que cuando tienen 24 y claro, cambia mucho la perspectiva.”, opina Eva. Por otro lado, Marta Sánchez y María Torrejón, quienes llevan una relación cerrada desde hace dos años y medio, opinan que el mayor problema que suele surgir actualmente en las relaciones entre jóvenes adultos en la costumbre a la volubilidad constante: “Lo que peor llevo es el agobio de estar siempre con la misma persona”, declara Marta, a lo cual María añade que cree “que los problemas que se dan a nuestra edad es que nadie sabe estar mucho tiempo con alguien”.
Uno de los temas más hablados cuando se tratan las relaciones de pareja actuales es la cuestión sobre si ciertos tipos de música o programas influencian en un sentido machista a la hora de mantener relaciones sentimentales. Celia Picón, quien rompió el pesado verano con el que fue su pareja durante un año y siete meses, no tiene dudas cuando le preguntamos sobre si este tipo de música y programas muestran imágenes tóxicas e irreales de lo que ha de ser una pareja: “Para nada, creo que a veces hay muchas relaciones así. Lo que pasa que no queremos ver la realidad. Hay mucha toxicidad en las relaciones, en ocasiones nos damos cuenta y otras necesitamos un gran desgate personal y sentimental para ello. Estas canciones y estos programas deberían hacernos reflexionar del mundo en el que vivimos e intentar mejorar la sociedad éticamente”. Eva García, por otro lado, identifica la mayor problemática de este contenido en que “nos muestran que jugar con los sentimientos de otra persona es algo normal y de poca seriedad y yo pienso que sí, que primero piensas en ti y en tus sentimientos, pero hay formas mejores para intentar no jugar con los sentimientos del otro”.
Acerca de este tipo de relaciones que se reflejan en la mayoría de programas y música actuales, caracterizadas por la volubilidad, los celos, la invalidación emocional y la gestión tóxica de las emociones, es sobre lo que se suele asentar la creencia de que “las relaciones largas no son para la gente joven”. Clara Lozano, quien lleva tan solo 7 meses saliendo con su actual pareja, opina que esta visión negativa de las relaciones en el imaginario colectivo es ficticia: “Creo que estamos entrando en una etapa en la que hay gente que decide que no está dispuesta a entrar en relaciones largas por diferentes motivos y gente que sabe que quiere estar dentro, pero no creo que se considere mejor o peor una u otra postura.”
Es obvio que la situación interpersonal individual es un factor decisivo a la hora de tener éxito en las relaciones sentimentales. Tal vez por ello conceptos como “validación sentimental”, “asertividad” y “madurez” cobran más fuerza en este tipo de contextos. Ante la pregunta de si considera que para poder mantener una relación fructuosa es necesario un gran trabajo a nivel interno, Celia Picón está segura: “Creo que sí, ya que estas inseguridades muchas veces las retroalimentamos entre nosotros. Además, creo que esas relaciones duraderas que antes se mantenían sí o sí, ahora resulta más complicado porque las personas no queremos estar soportando situaciones y caracteres que no congenian con nosotros. Creo que no es un aspecto negativo en el amor, sino que la forma de ver las relaciones está cambiando y no significa que sea algo negativo para nuestras vidas. Bajo mi punto de vista es mejor dejar a una persona y vivir tu vida a tener que estar enfadado/a todo el día, con actitudes que al final afectan a tu alrededor.”
Tal vez, debido a esto, es por lo que Carmen Cambronero, quien mantiene una relación desde hace 8 años con su pareja, opina que “es muy extraño ver a parejas que lleven un largo periodo de tiempo”, algo que ha sentido en repetidas ocasiones al ver la reacción de la gente ante su relación: “Poniendo mi relación de ejemplo, cuando la gente me pregunta cuánto llevo con mi pareja y les respondo, se quedan sorprendidos porque empezamos muy jóvenes y hoy en día seguimos juntos. Me dicen que qué aburrido, que no he vivido la vida. Yo respondo que para nada tiene que ver la relación que empezamos siendo tan niños con la de ahora, que ya somos adultos. Las prioridades de la pareja van cambiando con los años y hay que estar dispuesto a adaptarse.”
Sin duda, a pesar de las diferentes respuestas a las entrevistas, y por muy negativo que pueda parecer actualmente el panorama sentimental para las personas jóvenes, ante la pregunta de cuál consideran que es la clave para mantener una relación duradera y sana a estas edades, los entrevistados parecen tenerlo claro: “La clave es no ser egoísta. Por mucho que nos hayan impuesto que nosotros mismos somos lo más importante, la realidad es que a veces debemos bajar un puesto por voluntad propia, el orden de prioridades nunca puede ser algo fijo, siempre dependerá del tiempo. Para querer a alguien realmente, en algún momento de tú vida tiene que ser tú prioridad, solo así sabremos su verdadero valor. Cuando sintamos esto sin tener que menospreciarnos a nosotros mismo tendremos la clave de un amor real.”, opina Elena Muñoz, quien mantiene una relación cerrada desde hace un año. “La comunicación, la atracción, la empatía y el espacio.”, añade Alejandro Carmona, pareja de Clara. Para Marta y María la clave parece encontrarse en el equilibrio entre atracción física y mental, así como el primar la amistad antes que nada: “La clave es encontrar a alguien que te atraiga mentalmente, físicamente y, por qué no, sexualmente. Que sea tu amigo/a y tú confidente. No puedo concebir una relación sin una amistad.”, dice María; “El humor es muy importante, para mí. No puedo aburrirme en una relación. Ser amigos lo primero, pasártelo bien y que sea divertido. Además, hay que contar con la atracción física, es un cliché pero a fin de cuentas es un elemento importante”, añade Marta. En síntesis, y en palabras de Eva García, podríamos concluir con que existen tres factores determinantes en el éxito de una relación, sea a la edad que sea: “¡La confianza, el respeto y la comunicación!”, exclama Eva.